El linguine con Pesto de Tomates Secos y Mozzarella Burrata es un plato que combina la tradición culinaria italiana con un toque moderno y fresco. La pasta linguine, originaria de Liguria, se ve envuelta en un cremoso pesto elaborado con tomates secos, albahaca fresca, piñones y parmesano, creando una explosión de sabores mediterráneos. La corona de este festín la pone la mozzarella burrata, una bola de queso fresco de Apulia con un corazón cremoso y delicioso.
Linguine con Pesto: un poco de historia
Los orígenes del pesto se remontan a la antigua Génova, donde se utilizaba como una salsa para acompañar la pasta. La receta tradicional se elaboraba con albahaca fresca, ajo, piñones, queso parmesano y aceite de oliva. Con el tiempo, se fueron agregando otras variaciones, como la que incluye tomates secos, aportando un toque dulce y umami a la salsa.
La mozzarella burrata, por su parte, es un queso relativamente nuevo que surgió en la década de 1950 en Puglia, Italia. Se elabora con leche de vaca y se caracteriza por su textura única, con una mozzarella fresca en el exterior y un relleno cremoso y suave en el interior.
Datos curiosos
- La albahaca, ingrediente principal del pesto, es una hierba aromática con propiedades digestivas y antioxidantes.
- Los piñones, también presentes en el pesto, son ricos en proteínas, fibra y ácidos grasos saludables.
- El queso parmesano, que aporta un toque salado y umami al pesto, es una fuente de calcio y fósforo.
- Los tomates secos, que dan un sabor dulce y umami al pesto, son una buena fuente de licopeno, un antioxidante con propiedades anticancerígenas.
- La mozzarella burrata, además de ser deliciosa, es una buena fuente de proteínas, calcio y vitamina D.
Transporta tus papilas gustativas a un oasis de frescura y sabor con esta receta de linguine con Pesto de Tomates Secos y Mozzarella Burrata.